Hay personas que se esfuerzan en querer hacer que los demás piensen como ellos, que pasan sus días viendo que hacen mal los demás o simplemente si hacen algo distinto, para hablar y señalar, dedican su energía en aquello que no comparten, a exponerlo y haciéndolo más grande, en promover la discordia, en apartar el respeto por el señalamiento, todos deberíamos hacernos una pregunta reflexiva ¿y qué tal que yo soy el que se equivoca? Y si tuviera la razón, el señalamiento y la discordia realmente hará que me crean, hará que me sigan, cuando uno inicia un proyecto los que crean, que crean, los que no, pues no, los que compren, que compren y los que no, hay muchas opciones más afuera, uno da el consejo, el que lo tome, que lo tome, no hay que esperar y esforzarse en que lo hagan, porque al final es decisión de cada uno.
Creo que si yo sé algo, en lo que pienso que los demás están equivocados, debería enseñar con humildad, debería promover mis ideas sin imponer queriendo usar la fuerza y el señalamiento, debería dejar de gastar mi energía que podría invertir en mi propio proyecto, en los que me apoyan y me creen, en vez de gastarla intentando ser piedra en el camino, algunos usan esa energía no para demostrar una equivocación en sí, sino en su forma de hacerlo, querer enfrentar al otro, un sentimiento de soberbia, más que de enseñanza.
Y si nosotros queremos emprender, iniciar con nuestro propósito, no podemos pretender que nos entiendan completamente, si queremos realizar nuestro propósito, no deberíamos esperar que todos nos entiendan y lo acepten, porque si buscamos eso entonces nunca empezaríamos a realizarlo, querer que nuestras motivaciones, nuestras metas, nuestro sueño o nuestro propósito sea validado por todas las personas y que cumpla con sus expectativas y la visión de su verdad, es terminar haciendo lo que otros quieren, es frustrarse, pero el propósito es esencialmente personal, entonces quien quiera hacer que el propósito de alguien más sea como le parece, que en vez de ir señalando, midiendo y hablando sobre el propósito de alguien más, inicie el suyo, camine en el suyo y que la luz de su propio propósito sea la que realmente tenga un sentido de verdad, no la aceptación y validación de alguien más.
Personas que pasan su tiempo buscando si el propósito de alguien más cumple con sus criterios; me asombro como muchas personas se muestran completamente seguras de lo que creen que saben, yo siempre he sido muy cauteloso en salir a decir algo firmemente sin antes haber investigado profundamente y aun así, si me equivocara estaría abierto humildemente a decir me equivoque, cambie de opinión, tuve más información ahora etc., porque de lo contrario sería orgullo más que la razón.